El lobo y el cordero en el arroyo
Un lobo fijaba su mirada en un cordero que saciaba su sed en un arroyo, e ideó un simple pretexto a fin de atacarlo y comerlo.
Así que aunque estaba más arriba en el arroyo, y no tenía la corriente del arroyo en su dirección, le acuso de enturbiarle el agua que bebía.
El atrevido cordero le respondió:
Pero si sólo bebo mojando mis boca, y además estoy más abajo, no te puedo manchar el agua que tienes allá arriba.
Viéndose el lobo burlado antes su argumento, insistió:
– El año pasado molestaste a mis padres.
– Se defendió el cordero replicando,- ¡Pero si solo tengo seis meses, en aquel tiempo ni siquiera había nacido!
Entonces el lobo le dijo:
– Ya veo que te justificas muy bien, mas no por eso te perdonaré, y siempre serás mi cena.
Moraleja de la fábula del lobo y el cordero en el rio
Al malvado no le valen los argumentos para no actuar, aléjate de ellos.
Fin de la fábula con moraleja y refrán del lobo y el cordero en el rio.
Otro cuento con refrán ocurrió entre un lobo y un cordero
El lobo y el cordero en el templo
Un pequeño cordero sintiéndose perseguido y acosado por un lobo se refugió en un templo.
El lobo le gritó para hacer salir y le dijo, – Cordero sal del tempo, si el sacerdote te encuentra, te sacrificará a su Dios.
El pequeño cordero le respondió ¡Pues que sea así! prefiero ser víctima en nombre de un dios a tener que morir en tus colmillos.
Moraleja de la fábula del lobo y el cordero
Si vamos a ser sacrificados, más que sea con el mayor honor.
Fin del cuento del lobo y el cordero
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